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VÍA VERDE DE CASTRO - ALÉN:

Por la montaña oriental de Cantabria


El antiguo trazado del ferrocarril minero de Castro - Alén, transportaba el mineral desde los puerto de mineral de Callejamala, en Otañes hasta el puerto de Castro Urdiales. El programa de Vías Verdes del Ayuntamiento de Castro Urdiales tiene previsto recuperar esta ruta histórica desde el casco urbano a partir de la calle Leonardo Rucabado, obra que requiere salvar la autovía A-8 por Pando y rehabilitar el viaducto de Dombergón.

Podemos tomar la vía verde de Castro-Alén desde el valle de Sámano, desde Santullán, desde Los Corrales y desde Otañes (en el barrio de Llovera).

 

El túnel de la vía de Alén por su embocadura Norte durante las tareas de desbroce reaiizadas por el Taller de Empleo de Rutas Verdes. Carril bici habilitado sobre la vía de Alén, a la altura del polígono de La Tejera.

 

 

La vía verde de Alén desde sámano

Si salimos desde el casco urbano de Castro, desde la rotonda de Brazomar nos desplazamos en bici o andando por la carretera de Sámano (CA-520) hasta el barrio del Prado, frente al merendero de Elósegui; desde aquí  se inicia la vía verde que tiene un primer tramo de 150 m. de firme en asfalto que permite atravesar una urbanización reciente. Enseguida encontramos el habitual firme de balasto de las antiguas vías férreas.

 

 

Inicio de la vía verde desde la carretera de Sámano, a la derecha la vía verde a su paso por Ornás

 

Esta parte del recorrido nos permite divisar el conjunto del valle de Sámano y sus barrios que nos van a quedar siempre a la derecha: la Iglesia del Moral y la reciente masificación de viviendas unifamiliares, Llantada, La Cuadra, La Suma, Momeñe... y el conjunto del valle abrigado por la mole caliza de la Peña de Santullán (o Peña de Sámano)  sobre la que domina la explotación de cantera.

 


La Llosa de Sámano; a la izquierda la vía verde de Alén


Llegamos a Ornás (Km.0,800) dejando a la izquierda huertos de hortalizas de gran calidad y pasamos varias viviendas unifamiliares hasta toparnos con el talud de la autovía  A-8 (Km. 1,700). El itinerario prevé el paso por debajo de la autovía hasta Santullán, pero actualmente está cerrado por unas obras de urbanización; podemos continuar por los caminos rurales de La Llosa de Sámano, primero hacia el Sur y luego hacia el Este, para alcanzar por un camino de ligera pendiente a las estribaciones de Santullán, pueblo que atravesamos, pasando por su plaza y su Iglesia, para salir a la CA-250, a un cruce con la CA-252 que enlaza con Lusa y Mioño (Km. 2,950).

 

Vista panorámica de las vías verdes de Alén y Traslaviña a su paso por el valle de Otañes

 

La vía verde de Traslaviña desde Santullán

A la altura del cementerio de Santullán seguimos con cuidado por la CA-250 durante 300 m. dejando atrás el núcleo urbano y la entrada a las instalaciones de la cantera, a la derecha. Sería muy probable encontrar la carretera teñida de blanco, polvo de cal procedente de las instalaciones próximas. Nada mas pasar por la entrada de la cantera, tomamos una pista de acusada pendiente que nos lleva hasta la fábrica de Dolomitas del Norte, la fábrica de cal; a su izquierda hay una explanada desde donde comienza el tramo mas montañoso de la vía verde de Alén sin interrupciones hasta Callejamala. ( Km. 3,500).

Continuamos por una zona bastante sombría en las faldas del Pico de La Cruz. Un eucaliptal crece a la izquierda sobre la pendiente que cae la CA-250, carretera que nos quedará durante un tramo abajo a la izquierda. La ruta continua  sobre un talud ganado a las faldas calizas de la montaña, con tramos construidos mediante muros de contención en mampostería (yacimiento nº 27), atravesando trincheras y un balcón que nos permite una vista excepcional sobre la Casa Torre de Otañes (bien de interés cultural) y sobre el paisaje de pradería del Valle de Otañes.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La vía verde de Alén ofrece su trazado mas abrupto cuando atraviesa la falda del Pico de la Cruz de Otañes, lugar en el que la vía se sostiene mediante muros de contención. Desde ese balcón se puede admirar la Casa Torre de Otañés (Bién de Interés Cultural).

 


Estamos en la montaña oriental de Cantabria y observamos uno de sus rasgos singulares, el encinar cantábrico. La vía pasa al pie de Cueva Grande (no abierta al público), otro bien de interés cultural que alberga pinturas rupestres.

Dejamos el escarpado paisaje de montaña y nos acercamos al cruce de La Pedrueza (Km. 5,000). Desde aquí podemos enlazar con la Vía de Traslaviña cruzando la CA-250 y atravesando el núcleo urbano de Los Corrales. Seguimos muestro itinerario en dirección sur y en el paisaje dominan las plantaciones de eucaliptos, salpicadas por arboledas de especies autóctonas y rubíneas. Llegamos al barrio de Llovera (Km. 5,823), y pasamos por un puente de piedra con arco de medio punto por el que podemos acceder a Otañes. Seguimos ascendiendo suavemente entre eucaliptos y algunos prados por una zona donde la vía verde es mas sinuosa hasta llegar al pequeño túnel de Llovera ( Km. 6,710 ). Pasando el túnel, el río Callejamala nos queda siempre abajo y a la izquierda. Seguimos serpenteando durante unos 2 Km. por la ladera, siempre entre eucaliptales, hasta que nos topamos con el primero de los depósitos de mineral de Callejamala ( Km. 8,785). Son construcciones de sillarejo en caliza que almacenaban antaño el mineral proveniente de las minas de Alén (yacimientos nº 30 y 31).

 

Llegamos al final de la vía de Alén ( en la que nos llaman la atención los enormes depósitos de mineral (los Puertos de Callejamala ) construidos en sillarejo de piedra calíza.



Hasta aquí la vía verde. Hemos recorrido algo más de 9 km. Y estamos en un precioso lugar para descansar. Aquí, el río de Callejamala conserva su esplendor y también podemos observar otros yacimientos mineros (yacimientos nº 32 al 35). Los más montaraces, pueden continuar hasta las Muñecas y hasta Alén, o hasta Ventoso, atravesando el mejor conservado de los bosques autóctonos del municipio. Es itinerario muy habitual para los ciclistas de montaña durante los fines de semana. En cualquier caso, hay que tener especial cuidado con el tráfico forestal, y con las zonas de talud desprotegidas.
Al otro lado del río descubrimos los estribos de un puente ( Yacimiento nº 34 ). Desde ese lugar, si miramos en dirección Sureste observaremos una enorme trinchera en la que se ubicaba el plano inclinado de Saltolobo (Yacimiento nº 32). Aunque tiene una pendiente del 30% podemos subirlo sin dificultad accediendo así hasta  el túnel de Saltolobo a medio camino de la pista forestal que une el puerto de Las Múñecas con Callejamala.Este tramo es de gran belleza y a lo largo de sus 800 m. podemos disfrutar de una densa vegetación autóctona.